Esquema de trabajo
El desarrollo del proyecto se estructura en diversos procesos que permiten pasar de las mediciones en campo (registros) a los productos finales. En el siguiente esquema se presenta dicha estructura mostrando en color rojo los de registro, en azul los de gabinete y en verde los resultados: con marco discontinuo los provisionales y continuo los entregables.

Red topográfica
Como parte de los preparativos durante la fase de planificación, se contactó con el servicio de topografía de la Gerencia Municipal de Urbanismo del Ayuntamiento de Córdoba para conocer las bases disponibles en la zona que se utilizarían para que el levantamiento a efectuar dispusiese de coordenadas en el sistema municipal.
Lamentablemente, desde el servicio de topografía se nos indicó que no disponían de una buena infraestructura en el centro histórico, aún así, nos proporcionaron un extracto de la cartografía de la zona con la reseña de tres estaciones, 15-Museo, 25 y 26, que se podían utilizar como puntos de partida para el levantamiento.
Se consideró que se partiría de la estación 15 a la salida de la calle “Horno del Cristo” desde la que se tenía visual al interior del edificio, sin embargo, desde la estación 15 no había visual a otra base con coordenadas, necesaria para la orientación por lo que previamente hubo que estacionar en la estación 25, orientando con la estación 26 y obteniendo un punto auxiliar (P1) que se utilizaría para la orientación desde la estación 15, según el croquis siguiente. El cierre del itinerario desde la estación 25 pasando por la P1 para llegar a la estación 15 estaba por debajo del centímetro al comprobar las coordenadas con las disponibles en la reseña.

La red topográfica consiste en las bases y sus conexiones, debido a las características de los elementos a documentar, sólo fue posible establecer un anillo cerrado entre las estaciones P3-P4-P5 cuya comprobación resultó por debajo del centímetro, para el resto de estaciones hubo que recurrir a poligonales colgadas; con el fin de asegurar los resultados, se reiteraron las medidas de tal forma que desde cada estación se tomaban cuatro lecturas por cada visual.

Para completar la red topográfica se situaron sobre las paredes y pilares del yacimiento un conjunto de señales de puntería que permitían el estacionamiento libre en todo el yacimiento. Estas señales consisten en dianas plastificadas de 4x4 cm con su número de identificación.

A partir de esta base topográfica se procedió a documentar mediante radiación las estructuras significativas del yacimiento según las indicaciones del arqueólogo responsable de las labores de limpieza, D. Jerónimo Sánchez Velasco.
Una vez que se dispuso del plano con las estructuras documentadas y aprovechando de que se contaba con coordenadas absolutas se superpuso a los planos de campañas anteriores (realizados por D. Antonio Monterroso) con el fin de comprobar las situación de algunas estructuras que no habían podido documentarse por que fueron eliminadas en dichas campañas o porque pertenecían a zonas fuera de la actuación actual. Al hacerlo comprobamos que existía una desplazamiento significativo, cercano a los 2 metros que analizamos a continuación.
En la siguiente imagen se puede ver la diferencia entre la trama urbana, en rojo, la cartografía de las fases previas, en gris, y la realizada en esta campaña, en negro. Aunque es cierto que los límites de las excavaciones no son exactamente iguales (en las fases anteriores aparece algo más de superficie por el norte, entre 0’5 y 1 metro), se aprecia que la documentación de la presente fase queda incluso fuera del perímetro de la manzana que aparece en la cartografía.

Evidentemente, este desfase es del todo intolerable ya que impide relacionar los trabajos de diferentes campañas que es uno de los objetivos del proyecto.
Se volvieron a revisar todos los cálculos realizados no detectándose error alguno, por lo que se recurrió nuevamente a la Gerencia Municipal de Urbanismo haciéndole ver la diferencia detectada a lo que nos respondieron que existían diferencias de encaje entre la red topográfica y la cartografía, que hacían que no encajara completamente la trama urbana con la red topográfica.
Si se repasa la información suministrada por la Gerencia, podemos comprobar estas discrepancias.
A modo de ejemplo, en las siguientes imágenes se puede ver la estación 25, utilizada como punto de partida, tanto en la fotografía como en el croquis de situación suministrado, la estación se encuentra sobre la calzada en el cruce entre las dos calles (Encarnación y Rey Heredia) de tal forma que se tiene visual en ambas, sin embargo, en la representación sobre el plano aparece antes de llegar al cruce y sólo dispondría de visual en Encarnación.

De la misma forma, la estación 15 aparece desplazada y la estación 26, que está situada sobre el bordillo de la acera, aparece en la cartografía dentro de la manzana.
Por lo tanto, el problema que se planteaba es que si se utilizan las coordenadas suministradas por el Ayuntamiento, los datos no encajan con la cartografía existente por lo que no se pueden relacionar. Se pueden modificar las coordenadas de esta campaña identificando puntos comunes con campañas anteriores y desplazando el modelo en bloque, pero esta solución tampoco es del todo satisfactoria porque las futuras campañas seguirán sin encajar con los datos disponibles. Frente a esta situación, se ha decidido preparar dos ficheros de dibujo, en el primero se ha mantenido el sistema de coordenadas proporcionado por el Ayuntamiento y en el segundo se ha desplazado para que ajuste a las campañas anteriores. Las reseñas de los puntos establecidos y dianas cuentan con coordenadas en ambos sistemas.

Cuando el centro urbano de Córdoba cuente con coordenadas fiables serán necesario comprobar cuáles son las coordenadas correctas y realizar las transformaciones oportunas para convertir todos los dibujos y planos a este sistema.
Modelo geométrico
Apoyándose en la red de estaciones establecida en el punto anterior y mediante técnicas topográficas se procedió a radiar los elementos significativos según las indicaciones del arqueólogo responsable de las labores de limpieza de la excavación. El trabajo de campo se organizó en dos equipos de dos operarios que trabajaban de forma simultánea en diferentes partes del yacimiento durante los días que duró esta fase.

Durante la fase de registro, se contó con el asesoramiento continuo del personal responsable de la excavación que fue indicando cuáles eran las estructuras a documentar y resolvía las dudas que se iban produciendo a la hora de identificar las diferentes unidades estratigráficas. Esta participación es de gran importancia ya que permite una mejor estructuración de la información en campo y su clasificación acorde a los criterios más adecuados para los técnicos que deben utilizar estos productos en las fases posteriores.
La documentación representa los restos arqueológicos pero también las estructuras modernas del Museo lo que permite estudiar su articulación.
Partiendo de los datos de campo (imagen superior), se procede a la edición del modelo en el cual se corrige y se estructura definitivamente la información en el fichero de dibujo (imagen inferior).

El modelo vectorial contiene la información suficiente para definir la geometría de los elementos representados, pero su aspecto visual es bastante esquemático y puede ser complicado de interpretar, sobre todo en vistas perspectivas. El resultado es más evocador si se recubren las superficies mediante mallas como se puede apreciar en la siguiente imagen:

Dado que durante la fase de campo, no existía un listado de unidades estratigráficas definitivo –estaba en proceso de ejecución a la vez que la limpieza-, se partió de una clasificación provisional que se fue completando mediante contactos por correo electrónico con el arqueólogo responsable del proyecto, D. Jerónimo Sánchez Velasco. Finalmente, dicho arqueólogo se desplazó al Laboratorio de Documentación Geométrica del Patrimonio para revisar el modelo y completar la clasificación según el listado definitivo de unidades.
Organización de la información
La información se organiza en capas dentro de los archivos de dibujo, el nombre de cada capa viene precedido de un código numérico que permite establecer grupos de capas de temática similar.
Como se ha indicado, se han incluido dos ficheros, uno en cada sistema de coordenadas (el proporcionado por el sistema de topografía del Ayuntamiento y el ajustado a las fases anteriores), a continuación se describen las capas que organizan la información en el archivo en coordenadas del ayuntamiento:
En el fichero ajustado a las coordenadas de fases anteriores se han incluido capas con la trama urbana y los propios datos de las excavaciones anteriores. A partir de este fichero se han preparado los planos por lo que también cuenta con las capas en las que se presentan las secciones y los cajetines de los planos.