En 1982 la junta de gobierno de la Universidad del País Vasco realizó un encargo al artista Eduardo Chillida, a él le entusiasmó la idea y le regaló a la UPV/EHU el logo que hoy la representa. Inconfundible y un referente inequívoco de la universidad, es probablemente la obra más importante perteneciente a la universidad, pero no es la única. Nuestro patrimonio artístico acumula alrededor de 470 obras.

La universidad cuenta con un patrimonio artístico importante, y en la mayoría de los casos desconocido, que se ha ido ampliando con los años. El origen de las obras es muy diverso: concursos, donaciones, adquisiciones y encargos, sobre todo. Los autores y autoras también son muy diferentes: desde artistas ya consagrados cuando su obra llegó a la UPV/EHU, como pueden ser Nestor Basterretxea o José Luis Zumeta, hasta profesores y profesoras de Bellas Artes e incluso estudiantes, cuyas obras entraron a formar parte del patrimonio a través del concurso de adquisición de arte que organizaba la universidad. Este es el caso de los EHUalumni, hoy artistas reconocidos, Judas Arrieta o Mabi Revuelta, premio Gure Artea 2016.

Enara Artetxe y Alazne Porcel, profesoras de Conservación y Restauración del Departamento de Pintura de la Facultad de Bellas Artes, conocen a fondo buena parte de ese patrimonio artístico. Llevan 5 años trabajando en él y en su catalogación. Todo comenzó con un proyecto de innovación educativa, que las dos profesoras consiguieron para trabajar, a través del patrimonio artístico de la universidad, competencias transversales con el alumnado del Grado de Conservación y Restauración de Bienes Culturales. Al ponerlo en marcha percibieron la necesidad de profundizar y ampliar la catalogación de las obras que se habían recogido en diversas publicaciones de la universidad sobre su colección artística. “Llevábamos tiempo dando clases sobre cómo catalogar y conservar obras de arte y nos dimos cuenta de que teníamos al alcance de nuestra mano obras que eran susceptibles de ser catalogadas y estudiadas. La universidad tenía una colección que podía servir para trabajar conceptos que veíamos en el aula; eran unas prácticas perfectas para los y las estudiantes”, aseguran ambas.

El objetivo en un principio fue, por tanto, mejorar la formación del alumnado; las profesoras no se planteaban valerse para ello de los recursos de la universidad. Sin embargo, a medida que avanzaban en su trabajo de investigación se dieron cuenta de que era necesario visibilizar la colección de patrimonio artístico universitario, mediante la puesta en valor de estas obras referentes del desarrollo del arte vasco contemporáneo estrechamente ligado a su principal centro de creación y producción, la Facultad de Bellas Artes de la UPV/EHU.

En la tarea inicial de localización y descripción ha sido de gran ayuda el alumnado que ha participado en el proyecto. Y la labor continúa, con el objetivo de que el catálogo completo se pueda consultar en un futuro en la web, con referencia a las obras, su localización, fotografías y explicaciones sobre los autores y autoras.

De momento, Enara Artetxe y Alazne Porcel ya han organizado para el próximo mes de diciembre una jornada para dar a conocer el patrimonio artístico de la UPV/EHU, entre cuyas actividades está prevista una visita guiada a algunas de las obras del Área de Leioa-Erandio.