Este rincón me recuerda mis tiempos postdoctorales en la Universidad de Oxford. Llegué allí en el año 2005, tras doctorarme en Química-Física en la Universidad de Valladolid en el año 2000. Allí todo era nuevo, ya que quise aprender una nueva técnica espectroscópica. Tardé unos seis meses en trabajar con soltura en los nuevos equipos. Tengo un gran recuerdo de esa etapa ya que pasaba la mayor parte del tiempo en el laboratorio. No solo conseguí buenos resultados científicos, sino que contribuyó en gran medida a convertirme en el investigador que soy ahora.

Tras mi estancia en el Reino Unido aterricé en la Universidad del País Vasco. Aquí mis tareas se centran más en el liderazgo y gestión del grupo de investigación. El equipo de la foto, el cual hemos diseñado, construido y puesto a punto, es un espectrómetro de microondas con pulsos chirpeados. Este aparato no es comercial y está en continua evolución, y permite caracterizar en altísima resolución la estructura de moléculas. Su sensibilidad es una referencia mundial. Y personalmente, este rincón de nuestro laboratorio de la Facultad de Ciencia y Tecnología me recuerda aquella época cuando pasaba la mayor parte del tiempo en el laboratorio.

Ese es el lugar preferido de Emilio J. Cocinero, investigador doctor permanente del Departamento de Química Física y del Instituto Biofísica e investigador principal del Grupo de Espectroscopía. Él es también el autor de las líneas anteriores.

Nola iritsi: 43°19'49.1"N 2°58'13.3"W