“Esta vista desde mi puesto del Laboratorio de Paleobotánica Lydia Zapata me transmite multitud de recuerdos y sensaciones. Las tareas que se desarrollan en este espacio guardan relación tanto con el estudio de las pautas paleoambientales del pasado prehistórico como con el de las sociedades productoras (a partir del Neolítico), a través de sus restos botánicos.

Trabajamos en este edificio desde 1997, aunque la vista desde esta ventana, en tan corto lapso, ha cambiado bastante. A pesar de que el registro es demasiado breve para considerarlo estadísticamente significativo, quedan atrás aquellos inviernos en los que, habitualmente, heladas de bajísimas temperaturas cubrían de hielo y originaban largos carámbanos en el tejado vecino de la Facultad de Relaciones Laborales y Trabajo Social. Al levantar la mirada del microscopio, resultaba natural relacionar esa vista del tejado con la muestra estudiada que reflejaba la composición del paisaje vegetal durante uno de los episodios fríos estadiales del último periodo glaciar.

El carácter de esta interrelación de panoramas ha variado notablemente en los últimos años, ya que resulta innegable la percepción de que algo está cambiando en nuestro entorno. Ahora, esa mirada al tejado que se hiela con menor frecuencia debido a diferentes condiciones climáticas, me lleva a reflexionar sobre el modo en que interferimos en la dinámica natural medioambiental. Si bien este proceso se inició al adoptar la economía de producción, en la actualidad está alcanzado una escala y velocidad desconocidas hasta la fecha. Desgraciadamente, las repercusiones que este proceso puede generar en un futuro no muy lejano, nos alcanzan a todo el colectivo humano.”

Ese es el lugar elegido para Gure txokoak por Mari Jose Iriarte, profesora de Investigación UPV/EHU-Ikerbasque del Departamento de Geografía, Prehistoria y Arqueología. Ella es también la autora de estas líneas.

Cómo llegar: 42°50'23.4"N 2°40'12.2"W