Marcaida ha ganado por este estudio el accésit, dotado con 1.000€, de los Premios Académicos de de la Asociación Española de Codificación Comercial (AECOC), la agrupación empresarial a la que pertenecen más de 25.000 empresas, la práctica totalidad de las empresas de cierta relevancia que operan en el mercado de consumo, tanto por el lado de fabricantes y proveedores, como por el de canales de distribución.

El trabajo resalta diversas conclusiones: en primer lugar, el desconocimiento que existe acerca de los productos ecológicos que no sean alimenticios. "La gran mayoría de los consumidores examinados — realizamos una encuesta a 63 personas que realizan habitualmente la compra de su hogar— asocia los productos ecológicos a productos de alimentación y desconoce la existencia de otros tipos; por lo que su consumo es inferior", apunta la alumna de la Facultad de Economía y Empresa.

Invertir en comunicación

El estudio expone, además, que en el caso de estos productos ecológicos, los consumidores consideran que "el principal freno para consumirlos no es que sean más caros, como previamente intuíamos, sino la dificultad que conlleva encontrarlos". "Creemos que esta cuestión es de gran interés, ya que probablemente la solución para aumentar el consumo de estos productos no resida tanto en bajar los precios, como en informar más a los consumidores y mejorar la accesibilidad a los mismos en canales de distribución tradicionales", revela, tras comprobar que el precio de los productos ecológicos es sensiblemente superior a sus equivalentes convencionales. De hecho, el sobreprecio medio de la selección de productos analizados, un total de 50, es de un 66,18%, "habiendo algún caso en el que se llega a un 420% de diferencial". A pesar de este "sobreprecio", cuando los productos ecológicos tienen una buena distribución, como es el caso de los alimentos, aumentan sus ventas "incluso en una época de crisis económica como la que hemos vivido".

"Es indispensable que las empresas que producen este tipo de bienes inviertan en comunicación; por una parte, informando que existen productos ecológicos, además de los alimentos, respetuosos con el medioambiente y entiendan la contribución que hacen con su consumo a la conservación del planeta y, por otra parte, concienciando para que se valoren y aprecien estos tipos de productos, que entiendan la contribución que hacen con su consumo a la conservación del planeta", aconseja Marcaida.

Laura Marcaida, que se encuentra en estos momentos en el norte de Inglaterra para perfeccionar su inglés, se muestra satisfecha por la relevancia que ha tenido su estudio. "Que mi Trabajo Fin de Grado fuera uno de los mejores a nivel nacional, compitiendo con otros 68, es algo increíble. El premio, sobre todo, significa que si me esfuerzo y trabajo duro, puedo sacar adelante cualquier cosa. Me vino muy bien para darme cuenta de que el esfuerzo tiene su recompensa. Asimismo, quiero agradecer la ayuda que me proporcionó la tutora del trabajo, la profesora Maria Soledad Aguirre, que me orientó durante todo el proceso y me dio ideas. Lo más importante para mí fue que creyó en mí y en el trabajo que estaba haciendo en momentos en que yo misma estaba llena de dudas, eso era un factor motivador muy grande. Ella también se merece su reconocimiento".

Fotografía: de izq a drcha, Jaime Aguilera, presidente de  Unilever España; la profesora de la UPV/EHU Marisol Aguirre  y Laura Marcaida (UPV/EHU)
Fotografía de portada de Campusa: Maksim (CC-BY-SA)