Maider Uriarte Idiazabal (Colchester (Gran Bretaña), 1981 – Bilbao, 2016) era arquitecta (por la UPV/EHU) desde 2008.   Junto con los arquitectos Kepa Iturralde y Zigor Iturbe creo el taller de Arquitectura Metak en Bilbao.

Entre 2011-2013 fue investigadora becaria del departamento de Arquitectura de la UPV/EHU. Asimismo, entre 2012-2013 realizó una estancia para investigar en el Urban Lab de la University College London, además de en la cátedra Landscape Architecture and Regional Open Space (LAREG) de la Technical University  de Munich.

Era desde diciembre de 2014 profesora de Planificación Urbana y Organización Territorial. En octubre de 2015 consiguió el doctorado internacional  tras defender la tesis "Paisaiaren Ikuspegia eta bere Lau Dimentsioak: Metodo interpretatzaile konstruktibista baten proposamena Bilboaldeko hiri bazterreko paisaia menditsuen kasuan aplikatua" (La perspectiva del Paisaje y sus cuatro dimensiones: propuesta de método constructivista aplicado en el caso de los paisajes del borde urbano en los montes de Bilbao) bajo la dirección de Marte Mujika de la UPV/EHU y la profesora Sören Schöbel-Rutschmann de la Technical University  de Munich.

En 2009 fue una de las fundadoras de la revista «Aldiri. Arkitektura eta abar» (Udako Euskal Unibertsitatea), y  desde 2015 miembro de la dirección. Entre 2011 y 2013 firmó artículos sobre arquitectura en el suplemento Ortzadar del grupo Noticias.

Las principales líneas de investigación de Maider Uriarte se centraron en el entorno y el paisaje. Es decir, en los diferentes modos que tienen las sociedades y las culturas para entender, representar y crear el entorno; y en la herramienta más adecuada para analizar ese  fenómeno: el paisaje.
El paisaje, en palabras de Maider Uriarte, está entre el dominio de  a interpretación formal y funcional, entre la precepción física y abstracta, considerando el territorio de un modo cultural.

La vocación de Maider era el pensamiento crítico. En sus enseñanzas prácticas y escritos  se podía percibir la fuerza de la juventud y la agudeza de la madurez. Llevó a cabo una trayectoria tan corta como intensa. Se puede subrayar la proyección internacional y la adhesión con el euskara; se ocupó,  de forma ferviente y generosa,  de la difusión del paisaje cultural que reivindicaba, desde casa y hacia fuera.

Unai Fernandez de Betoño y Ula Iruretagoiena
Profesores de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura