Este informe del primer trimestre de 2017 confirma que en los últimos 12 meses ha aumentado en 8.300 personas la población adulta (mayores de 16 años), ha disminuido en 2.325 personas las personas ocupadas y ha habido, asimismo, una disminución 17.175 desempleados. Aunque el dato que más se recalca en el informe es  el "preocupante" aumento de unas 20.000 personas inactivas nuevas. "El desempleo cae en Euskadi en los últimos 12 meses por el aumento de la inactividad y no por el aumento en el empleo", avisa De la Rica.

Este aumento de las personas inactivas puede deberse, según el trabajo de De la Rica,  a los siguientes cuatro factores: "(i)El envejecimiento de la población provoca que entren cada vez menos personas al colectivo de adultos y que salgan cada vez más hacia la inactividad por entrar en la edad de la jubilación; (ii)las  personas,  tanto  las ocupadas como desempleadas , pueden tomar la decisión de jubilarse de forma anticipada o entrar en una situación de pre-jubilación; (iii) personas desempleadas desanimadas que dejan de buscar empleo, y por último (iv) personas que transitan a la inactividad desde el empleo o desde el desempleo por decisiones personales y/o familiares", detalla.

De la Rica cree que se debe responder a esta situación articulando medidas que "fomenten una mayor conexión de los ciudadanos con el mercado laboral". Precisamente, muchas de estas medidas pasan por habilitar "relaciones flexibles" con el empleo, tanto para jóvenes que puedan estar terminando sus estudios, como para "personas mayores de 65 que pueden desear trabajar unas horas al día", o para otros colectivos que querrían trabajar, pero la dificultad de conciliar la vida laboral con la familiar les "obliga" a mantenerse inactivos. 

El estudio también revela que aumenta sensiblemente la incidencia de mujeres en el colectivo de desempleados, que han pasado de ser el 47,8% en el primer trimestre de 2016 hasta llegar al 52% en este trimestre. "Este aumento es importante, y de hecho, la presencia de mujeres en el colectivo de desempleados es mayor que en el resto de España. El hecho de que la industria esté ganando peso en el empleo en Euskadi puede estar detrás de este dato, pues la industria es un sector cuyo empleo está fuertemente masculinizado. En definitiva, las mujeres, mayores de 44 años y desempleadas de larga duración son posiblemente un perfil no sólo cada vez más numeroso en el colectivo de desempleados, sino también aquel que sufre mayores dificultades para encontrar un empleo.", expone De la Rica.

El informe constata también la recuperación de la industria, que viene acompañada de empleos más estables y con un aumento de la jornada completa

Respecto a los datos más positivos, el trabajo señala que el desempleo en Euskadi se sitúa por debajo del 12%, en concreto en el 11,8%. Así, la CAV es, junto a Navarra y La Rioja, una de las regiones con menores tasas de desempleo. De hecho, Euskadi ha disminuido en estos 12 meses su tasa de desempleo en 1 punto porcentual. En gran parte por la recuperación de la industria, que ya emplea a 23 de cada 100 personas ocupadas. Un sector que ofrece además empleo más estable y jornadas completas. No obstante, es el sector servicios quien "sigue siendo" el que más empleo genera, ocupando a 70 de cada 100 empleados. Así, Euskadi cuenta, en este primer trimestre de 2017, según la EPA (Encuesta de Población Activa), con unas 895.000 personas ocupadas, que representa el 49,26% del total de la población adulta.

Comparativa EPA/EPRA

El Informe Laboral Euskadi del 1º trimestre de 2017 muestra también los datos de evolución de ocupados en cada primer trimestre desde hace 10 años (2007), tanto con la información de la EPRA (Encuesta de la Población en Relación con la Actividad), realizada desde EUSTAT; como con la de la EPA (Encuesta de Población Activa), que realiza el INE (Instituto Nacional de Estadística). De la Rica explica que han considerado necesario añadir esta comparativa en el informe por el ruido que trimestre a trimestre "aparece al confrontar" los datos de la EPA con los de la EPRA.  "Al margen de algunas discrepancias puntuales entre ambas fuentes, que provienen de las diferencias en las muestras utilizadas, ambas fuentes marcan una tendencia muy similar: el empleo cae suavemente desde 2008 hasta 2011, acelera su caída hasta 2014, para comenzar a partir de ese momento con una ligera recuperación. Ambas series muestran que es necesario recuperar unos 100.000 empleos más para alcanzar los niveles de empleo que teníamos antes de la crisis", advierte.