El Laboratorio de Innovación Social de Arantzazu, Arantzazulab, se inauguró oficialmente en el centro Gandiaga Topagunea de Arantzazu (Oñati). En el acto de presentación participaron, entre otros agentes, el vicerrector del Campus de Gipuzkoa de la Universidad del País Vasco, Agustín Erkizia, y Naiara Goia, directora general de Arantzazulab.

“Arantzazu es un lugar único para promover la colaboración entre las universidades vascas, pues reúne condiciones esenciales y fundamentales para que eso ocurra; tiene una gran fuerza simbólica que asociamos con la lengua y la cultura vascas, es un referente de pensamiento abierto y constructivo y, desde siempre, ha ofrecido una mirada especialmente nítida sobre los retos a los que nos enfrentamos como sociedad”, declaró Agustín Erkizia en la inauguración. “Arantzazulab nos ofrece una excelente oportunidad para reflexionar, investigar y crear conocimiento sobre los problemas del futuro, y para la UPV/EHU es muy grato formar parte de este ilusionante proyecto de colaboración para construir puentes entre el ayer, el hoy y el mañana.”

“Es vital transformar la sociedad para que esta pueda hacer frente al complejo contexto actual, repleto de incertidumbres y de continuos cambios. Y para que la ciudadanía se adapte a ellos, el punto de partida de la transformación reside en el individuo, en cada uno de nosotros y nosotras”, destacó Naiara Goia. Desde el inicio y hasta la fecha, la Universidad del País Vasco, Mondragon Unibertsitatea y la Universidad de Deusto han tenido un papel clave como agentes de Arantzazulab. La colaboración en el diseño del proyecto es un hecho singular, circunstancia que permite calificar la iniciativa como un hito de la cooperación. Además, todas ellas, que forman parte del Consejo Asesor de Arantzazulab, son agentes activos que desde el espacio de cooperación tratan de impulsar la investigación.

En ese espacio trabaja coordinando la aportación de la UPV/EHU Antonio Casado, investigador principal del grupo ETICOP. Junto a Agustin Erkizia y los representantes de las demás universidades, su misión es conectar las innovaciones sociales que se desarrollarán en Arantzazulab con la investigación básica que se hace en la UPV/EHU. A su juicio, “estamos inmersos en una profunda transformación: climática, energética, demográfica, digital… están surgiendo nuevas formas de relacionarnos, aprender y trabajar. Vivimos tiempos de transición. También podemos ser víctima de esas transiciones si no tenemos las capacidades necesarias para afrontarlas, pues todo está en juego: el bienestar, la convivencia, el mismo futuro. Debemos tomar la transformación en nuestras manos.”