Karlos Santamaria eta haren idazlanak

 

Carlos Santamaría, consejero de Educación del CGV. Obligatoriedad, gradual y progresiva de la enseñanza del euskara

 

Egin, 1978-05-11

 

      Gizartea aldatzen ari den une honetan, Euskal Herria, bere etorkizunari begira, garrantzizkoak izan daitezkeen pausoak ematen ari den une honetan, euskara hizkuntzaren gainean eta bere etorkizunaz mintzatu da EGIN Hezkuntza Kontseilari den Karlos Santamariarekin. Arazoa bere osotasunean hartzen du eta Euskal Herriari begira beharrezkoak diren konkrezioak eskatzen. Estatuan herrialdeen hizkuntza irakatsi beharra. Euskal Herrian euskara ikasteko obligazioa estutu beharra, eta euskaraz irakats dezaketen eskola publikoak sortu beharra, Unibertsitatean euskarari bidezkoa den lekua egin beharra... Hauk dira Karlos Santamariak azaltzen dituen puntuetarik batzu. Euskal kontseilariak gogoz erantzun zien Mikel Ugaldek egindako galderei.

 

      El futuro educativo del País Vasco, las bases sobre las que se ha de asentar su estructura educativa, es objeto de preocupación para amplios sectores de la sociedad. Los responsables de la educación del futuro del país habrán de dar una solución al problema lingüístico y a la situación diglósica en que actualmente se encuentra el euskara.

      EGIN ha conversado con el Consejero de Educación Carlos Santamaría y ha recogido sus puntos de vista en relación con las medidas a tomar en torno al futuro del euskara.

 

      Existen diversas posibilidades de actuación de cara al euskara dentro de un plan de enseñanza. ¿Cuáles son las medidas concretas que habrán de tomarse para dar una solución satisfactoria?

      La cuestión es demasiado vasta y profunda para que pueda reducirse a unas pocas medidas concretas e inmediatas. Refiriéndome exclusivamente a un plan de bilingüismo en la enseñanza, creo que debe empezarse por establecer una distribución territorial del País en zonas lingüísticas de —por lo menos— tres tipos, es decir, fundamentalmente: Zona vascoparlantes, mixta y castellano parlante. En cada una de estas zonas debe seguirse una política lingüística distinta, adecuada a las necesidades y posibilidades de cada caso. Es evidente que la forma de cultivo y difusión del euskara no puede ser la misma en Ataun que en Valtierra.

 

Euskara para todos

 

      Enseñanza del euskara, sí, ¿pero de forma obligatoria o más bien voluntaria?

      A mi juicio la dialéctica obligatoriedad-voluntariedad en la Enseñanza debe ser superada. Todo plan de Educación implica cierta base de obligatoriedad o de imposición que no hay más remedio que admitir. El estudiante pone siempre en duda la utilidad de las materias que se le exigen, pero si se tuvieran en cuenta estos criterios personales no habría plan de enseñanza que se sostuviera. Las lenguas de las nacionalidades han estado desterradas del campo de la Enseñanza desde hace muchos años, o mejor dicho, desde siempre. Eran tabú, delito. Esto va a cambiar. Ahora se trata de llevarlas al lugar que les corresponde como un elemento importante de la cultura de los pueblos. Algunas personas —de cultura muy discutible— protestan: «no se nos puede obligar a aprender catalán, euskara o gallego».

      En cambio no se extrañan de que a sus hijos se les obligue a aprender la lista de los reyes godos, la clasificación de los insectos o las extracción de la raíz cúbica, cosas que a la inmensa mayoría de los ciudadanos no les va a servir absolutamente para nada. Euskalparlante o no, para un vasco el conocimiento, aunque sea rudimentario, de la lengua originaria de su pueblo no puede menos de ser un elemento de formación cultural con mucho mayor motivo que otras diversas materias de Córdoba que se estudian en la Escuela. Para empezar, yo tengo el criterio de que todo niño español, sea de la región o nacionalidad que sea, debería aprender obligatoriamente en la Escuela unas nociones, por muy elementales que fuesen, de «las otras lenguas», unas ideas gramaticales y un pequeño léxico comparativo de las mismas. A algunos les parecerá absurdo pero esta idea es, a mi juicio, perfectamente realizable y sumamente conveniente para fomentar una solidaridad cultural entre los pueblos. Creo que esta enseñanza es fácil de encajar sea en EGB o en BUP, o mejor todavía, en ambos grados. Dicho esto, está claro que en una población con particularidad lingüística, el conocimiento de la lengua propia debe ser en un grado más intenso, un elemento de la formación cultural con carácter obligatorio como cualquier otra asignatura siempre que en esto no se produzca en la práctica ningún abuso ni imposición odiosa. Yo creo que no hay persona razonable que no acepte esta idea. La cuestión está en saber cómo llevar a cabo sin herir ciertas susceptibilidades. Finalmente, en las zonas vernáculo-parlantes la obligación del conocimiento de la lengua local es todavía más evidente.

 

      Â¿Es decir que un estudiante andaluz, en Andalucía, debería aprender algo de euskara, catalán o gallego?

      En efecto, yo lo creo así y lo sostengo sin que vea en ello ninguna barbaridad. Si el Estado español ha de tener una coherencia cultural estimo que ésta debe hacerse así. Pienso que en una sociedad que trata de fortalecer la cultura popular esta tesis es perfectamente defendible y creo que su aplicación haría un gran bien. También el joven euskaldun debería aprender, pues, en alguna fase de sus estudios un poquito de catalán y de gallego y no perdería nada con ello, al contrario. La solidaridad de los pueblos ibéricos no debe ser una palabra vacía; debe proyectarse sobre el campo de la enseñanza. A cuantas personas he planteado esta idea a través de un análisis sereno, todas me lo han aceptado.

 

      Sería interesante una mayor concreción de cara a Euskal Herria...

      Efectivamente. Si en la generalidad del Estado el alumno ha de conocer algunos rudimentos y aspectos básicos de las lenguas que se hablan en España, es justo que esta exigencia sea mayor dentro del marco autónomo de cada una de las diversas nacionalidades. Para ello, dentro de Euskadi habría que plantear la obligatoriedad de la enseñanza del euskara de una forma gradual y progresiva, para que de un modo natural los jóvenes vascos aprendan esta lengua. Y todo ello, independientemente de que existan centro bilingües especializados en los que la enseñanza no sólo del euskara sino «en» euskara.

 

      Â¿En qué grado estaría presente el euskara en la Universidad?

      Si el euskara no entrara en la Universidad esto significaría que se había congelado definitivamente una situación diglósica que no podemos aceptar. Una lengua en estas condiciones está condenada a su extinción. De todas formas, también hay que tener en cuenta que el porvenir del euskara no solo va a depender de una normativa legal o jurídica sino también de la misma actividad de los vascoparlantes. En la medida que hagamos del euskara un instrumento operativo y eficaz, las posibilidades serán mayores. Si hay profesores que están preparados para impartir enseñanza de tipo superior en euskara y alumnos dispuestos a recibirla en esta lengua, no habrá dificultad para que la lengua vasca entre un día, no lejano tal vez, con todos los honores en la Universidad. Por ejemplo, en Matemáticas, la terminología necesaria ya está suficientemente elaborada y preparada. No habría, por tanto, ninguna dificultad técnica, siempre que haya personas que lo deseen o estimen conveniente enseñar en euskara las Matemáticas superiores pueden ya desde ahora ser enseñados en euskara.

 

Las ikastolas, alternativa para Euskadi

 

      Se habla de que la misma Administración promueva escuelas en las que también se aprenda euskara. ¿Cómo quedarían las ikastolas?

      Por las circunstancias, motivaciones y situaciones en que han surgido, habría que ir hacia un estatuto especial para las mismas. La ikastola no es una escuela privada, surgió del pueblo, con el fin de dar una alternativa pedagógica que el Estado no ofrecía. Una alternativa adecuada a la personalidad de este pueblo. La ikastola es una escuela popular y este es el estilo en que creo que ha de configurarse el futuro de las escuelas del País, pero las escuelas bilingües estatales u oficiales son perfectamente posibles también y deben de realizarse gradualmente.

 

      Â¿Qué piensa del debate esuela pública-escuela privada?

      Esta discusión sobrepasa nuestro propio ámbito y se enmarca en un marco incluso constitucional. En el fondo la dificultad está en la enseñanza religiosa. En la medida que la Iglesia reflexione sobre su propia situación y sea consciente de la debilidad de sus logros catequéticos en estos años a través de los centros escolares que dirige, podría facilitarse la vía a soluciones más abiertas. De hecho, basta ver cómo piensa la mayoría de esta juventud que ha estudiado en centros religiosos y los efectos negativos que, en cuanto al planteamiento religioso, han tenido muchos de sus estudiantes. Creo que debemos de ir hacia una nueva concepción de la escuela pública en la que el fenómeno y el hecho religioso pueda tener cabida si se acierta a plantearlo debida e inteligentemente. Pero para esto hará falta la inventiva y buena voluntad por parte de todos.

 

  • Bilaketa-sistema honek letra-multzoak bilatzen ditu (ez dago ez lematizatzailerik ez inolako analisirik).

  • Hitzaren hasiera bilatzen da beti, eta ez hitzaren barrukoa (etx bilaketak ez du aurkituko basetxe).

  • Hitz-multzoak bilatu daitezke, hitz-segida emanez gero (kristau fede adibidez).

  • Bilaketaren corpusa hautatzeko aukera dago: euskarazkoetan soilik / gaztelaniazkoetan soilik / hizkuntza guztietan (euskarazkoak, gaztelaniazkoak eta frantsesezkoak batera).

Nodoa: liferay2.lgp.ehu.es