¿Qué implicaciones tiene el camino elegido al finalizar la ESO en los estudios universitarios que se realizarán más adelante? ¿Por qué al pensar en las profesiones de enfermería o enseñanza nos viene a la mente la imagen de una mujer y al pensar en la informática o en la ingeniería imaginamos a hombres? 35 profesores/as de la Universidad han contestado de una manera muy dinámica a estas y a otras preguntas. En concreto, se han centrado en estos temas: los aspectos más importantes sobre el acceso, las áreas de conocimiento, los grados, las salidas profesionales y varios recursos para que el alumnado tenga acceso a toda la información.

En este encuentro organizado por la Dirección de Estudiantes del Vicerrectorado de Estudiantes y Empleabilidad, se creó un ambiente de cercanía y comunicación entre los/as participantes, por lo que resultó sencillo resolver dudas y casos prácticos. Montse Maritxalar, directora de Estudiantes de la UPV/EHU, ha explicado que “tanto el profesorado de Educación Secundaria como el de la Universidad han podido compartir sus respectivas realidades en un ambiente agradable”.

Los/as participantes también han tenido ocasión de reflexionar: hoy en día, hay que acabar con los estereotipos en el proceso de orientación de los/as jóvenes; por lo tanto, hay que abrirles un amplio abanico de posibilidades de estudio. Por otro lado, el objetivo no es escoger los estudios; más bien se trata de dar un primer paso en el camino hacia el futuro de estos/as jóvenes.

“Si un/a alumno/a no consigue suficiente calificación en el primer intento para acceder a los estudios que quiere realizar, debemos transmitirle tranquilidad; ya que seguramente encontrará más adelante el camino para desarrollar su vocación —recuerda Maritxalar—. De hecho, el sistema educativo actual posibilita numerosos recorridos académicos. Al fin y al cabo, en esta sociedad hacen falta todo tipo de perfiles profesionales, y para lograrlo, en los procesos orientativos debemos hacer entender al alumnado que una vez terminada la universidad existen más opciones formativas, como los másteres, por ejemplo”.

A lo largo del encuentro, han querido subrayar que es el propio alumnado el que debe elegir sus estudios. La labor de los/as adultos/as consiste en acompañarlos en el proceso, en ofrecerles información directa y adecuada, siempre teniendo en cuenta que la voluntad del alumnado debe ser el eje de su elección.