“Éramos unos kamikazes, unos atrevidos con mucha sensibilidad social. Había mucha audacia y mucha osadía”. Así explica Koldo Unceta, el primer director de Hegoa, el nacimiento de este instituto, que hoy, 24 de noviembre, celebra 30 años de existencia reflexionando sobre los Desafíos para el desarrollo, la paz y los derechos humanos. La jornada cuenta con las aportaciones de Jenny Pearce, investigadora de London School of Economics; Itziar Ruiz-Giménez profesora de la Universidad Autónoma de Madrid; Mariano Aguirre, asesor del Coordinador Residente de las Naciones Unidas en Colombia, y Paco Etxeberria, profesor de la UPV/EHU y presidente de la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

El actual director de Hegoa, Karlos Pérez de Armiño, destaca que “el momento político de hace 30 años marcó a una generación, hija de un tiempo con un idealismo y una capacidad de entrega que hizo posible el proyecto; y nuestro reto es mantener esa esencia, seguir construyendo equipos comprometidos con la sociedad, sustentados en el espíritu Hegoa”. La reflexión y la investigación, en definitiva, el trabajo académico, es uno de los pilares del Instituto, pero el otro, y no menos importante, es el compromiso social: el vínculo con el voluntariado.

La marea Hegoa

El instituto fue un proyecto, pionero en Euskadi, impulsado por no más de media docena de personas y que 30 años después congrega en torno a sí a más de 60. Pero, además, aquella iniciativa altruista, se ha convertido en referente universitario, social e institucional en el País Vasco y en el mundo. “A día de hoy, la cooperación y los movimientos sociales no pueden entenderse sin Hegoa”, apunta Koldo Unceta. Una opinión compartida por Karlos Pérez de Armiño, quien recuerda que “gran parte de los cuadros de los movimientos sociales del País Vasco y del Estado, de los técnicos del Gobierno Vasco, de la Agencia Vasca de Cooperación, de las diputaciones, de los ayuntamientos… se han formado en nuestros másteres”.

Unceta: “Éramos unos kamikazes con mucha sensibilidad social”

Para el curso 2017-2018, el Master Universitario de Desarrollo y Cooperación Internacional ha sido el título más demandado, con 186 preinscripciones; mientras que el Máster Universitario en Globalización y Desarrollo se ha situado en cuarto lugar con 100 solicitudes. “Esta situación se repite todos los años. En los últimos diez cursos —explica Pérez de Armiño—.482 personas se han matriculado en nuestros másteres oficiales (Máster en Globalización y Desarrollo: 206; Máster en Desarrollo y Cooperación Internacional: 276) Cuando existía el título propio fueron 188. Y en estos momentos, tenemos 87 tesis matriculadas.”.

Junto a la formación, la investigación es el otro pilar de trabajo de Hegoa. “Hemos querido desde el principio generar conocimiento útil para la sociedad, que sea práctico”, apunta Koldo Unceta. Con esta filosofía nació el Centro de Documentación y la Biblioteca Digital. Ambas reúnen un fondo especializado con más de 20.400 registros bibliográficos, 6.500 libros físicos y un tesauro propio de 1.100 descriptores y son de acceso libre para todo el público. Además, desde 2007 hasta el 2016 la evolución de las descargas ha sido exponencial. Hace diez años, se descargaron 15.905 documentos; 2016 cerró con 1.262.353 descargas. De ellas, un 51% se realizaron desde América Latina, un 17% desde la Comunidad Autónoma Vasca, un 23% desde el resto del Estado, un 6% desde Europa y el 3% desde el resto del mundo.

Mirando al futuro: Investigación transdisciplinar

Mantener el ‘espiritu Hegoa’ combinándolo con el uso de la tecnología digital para la difusión de las investigaciones y las publicaciones, es uno los desafíos que afronta el instituto a partir de ahora. “Así mismo queremos atraer jóvenes que investiguen en cooperación y desarrollo, con capacidad técnica y profesional, que desarrollen un conocimiento crítico sobre los grandes cambios y desigualdades actuales, en un mundo incierto donde en el Norte hay mucho Sur; y en el Sur, Norte”, apunta el actual director de Hegoa.

Además, el equipo del instituto quiere ampliar las áreas de trabajo de los Estudios en Desarrollo para atender las actuales demandas sociales. “Los derechos humanos, la ecología y el medio ambiente, el desarrollo de políticas exteriores e interiores coherentes y vinculadas toman nuevas posiciones en nuestra sociedad. Cada vez se hacen más necesarias una economía social y solidaria, nuevas estrategias para la construcción de la paz y el tratamiento de los conflictos armados, la memoria, la violencia y la reparación. Y, sin olvidarnos, del género y el desarrollo como espacio importante de trabajo”, desgrana Koldo Unceta.

Pérez de Armiño: “Nuestro reto es mantener el idealismo y la capacidad de entrega” 

En este sentido, Hegoa aporta estudios transversales y multidisciplinares para arrojar luz sobre conflictos que requieren soluciones abiertas. “No es posible encasillar los problemas en una disciplina académica. Las vías de trabajo e investigación deben generar soluciones transdisciplinares, —coindicen en señalar ambos directores—. En este sentido, reivindican que ANECA reconozca la labor de investigación que realizan en el instituto, que se rompa las fronteras académicas que imponen el concepto de disciplina, y que los ‘Estudios en desarrollo’ tengan la misma consideración que ya tienen en otros países como Gran Bretaña”.

Hegoa es un instituto mixto de la Universidad del País Vasco y la Asociación Hegoa que surgió en 1987. Tras Koldo Unceta, Pedro Ibarra, Luis Guridi y, en la actualidad, Karlos Pérez de Armiño han ocupado la dirección del Instituto. En estos 30 años ha formado, investigado y asesorado en materias de desarrollo y cooperación y cuenta con un Centro de Documentación, referente imprescindible en el ámbito de la cooperación internacional y desarrollo.