Desde el pesar y dolor compartido por el fallecimiento el pasado 15 de febrero del profesor, compañero y amigo Jesús Mari Cabezas, queremos ensalzar su persona, reconociendo y agradeciendo su gran calidad humana, su amistad y entusiasmo en su labor como profesor.

Recogemos por ello, a continuación, tres testimonios de dos estudiantes y un profesor.

No solo la Escuela de Ingeniería de Vitoria-Gasteiz ha perdido a un grandísimo profesor, sino el mundo entero también lo ha hecho. Le apasionaba enseñar matemáticas, de eso estoy segura, así lo transmitía en cada clase. Logró que entendiese el álgebra, me gustase y que viese la belleza que tiene, lo bonita que es.

Descansa en paz, amigo, te echaré en falta.

Uhma Aitana Sánchez

Se nos ha ido una gran persona, tanto humana como docente. Él quería que fuéramos buenos trabajadores, con un código ético y que, además, como ha sido su vida, trabajando y con esfuerzo todo es lograble. Una vida basada en el esfuerzo, donde día a día él daba el todo para que aprendiésemos. Como alumno, recuerdo sus primeras clases de hace cuatro años, motivador, enérgico. Se nos va un grande. Un fuerte abrazo y ánimo a toda la comunidad educativa que ha compartido tantas horas con él y a su familia.

Mi más sentido pésame.

David Araujo.

Al enterarme ayer de tu muerte, me quedé de piedra. ¡Cuánto lo siento! La Universidad pierde un excelente profesor de Matemáticas. Descansa en paz.

Juan-Miguel Gracia.

El conjunto del PDI, PAS y alumnado de la Escuela de Ingeniería de Vitoria-Gasteiz