Hay corredores de todos los tipos, algunos parecen profesionales. No sería de extrañar, porque este año la prueba es Campeonato de Gipuzkoa de 10 km en ruta. Sólo los federados pueden participar, pero todos correremos los 10 km del recorrido, por supuesto.

Arriba y abajo, correr, estirar un poco, volver a coger ritmo… El tiempo pasa volando. Tengo delante un chico que corre descalzo. No es la primera vez que veo pie contra asfalto en carrera, dicen que es mucho mejor que hacerlo con zapatillas, más natural. Yo, de momento, no tengo intención de probarlo.

He visto alguna cara conocida, y algún amigo también. Todos agradeciendo el buen tiempo. Menos mal, la verdad. Hace justo una semana, en la carrera Lilaton, en Donostia, el ambiente era bien distinto: frio, lluvia, granizo, viento… También entonces disfrutamos, y hoy repetiremos, seguro.

«El dorsal 0 lo ha recibido la Asociación Salvamento Marítimo Humanitario»

9:50. Sólo faltan diez minutos. Casi todos estamos ya colocados en la línea de salida, cada cual en su cajón. Para esta edición, para ordenar de alguna forma a los corredores, la organización ha dispuesto varios cajones; de 40, 45 y 50 minutos. Así, ordenados por tiempos, cada uno correrá rodeada de gente que lo hará a su mismo ritmo. Estoy ya en el cajón de 45 minutos. A ver qué tal terminamos, ya veremos.

Como todos los años, este también hay dorsal 0 y 1. Se trata de dorsales muy especiales. En esta edición el dorsal 0, el dorsal solidario, lo ha recibido la Asociación Salvamento Marítimo Humanitario (SMH). Llevan meses trabajando en el mar Egeo, en la isla de Chios, ayudando a los refugiados que intentan entrar en Europa por mar. Su labor es totalmente voluntaria, tanto que cada rescatista se paga su billete de avión, tal como nos lo contó Iñigo Gutiérrez en la presentación de la carrera. Al finalizar la carrera SMH recibirá un cheque de 3.000 euros. "Para nosotros es mucho dinero, estamos encantados, emocionados", señaló en la rueda de prensa.

En esta ocasión el dorsal 1 es doble, lo llevan el músico Serafín Zubiri, y la ex corredora Coro Fuentes, campeona de España en cinco ocasiones y poseedora en numerosas ocasiones del record estatal. Zubiri está ya en primera fila de salida.

10:00. En punto. ¡Vamos! Somos cerca de 1.700 corredores los que salimos desde el Paseo de Berio. Antes de darnos cuenta ya hemos pasado la Plaza Europa, dejando atrás el Campus de Gipuzkoa. A buen ritmo bajamos la Avenida de Tolosa. Tal vez vaya un poco demasiado rápido, y no conviene. En las carreras los "excesos" siempre se pagan. Aun así todos hemos empezado fuerte, así suele ser, pero ya se encargarán los kilómetros de poner a cada cual en su sitio. Detrás viene alguien resoplando, un corredor, en masculino; temo que se ahogue si sigue así.

Llegados a Ondarreta, creo que ya voy casi a mi ritmo. Dejamos el parque de Miramar a la izquierda, y ya estamos en La Concha. Aquí está el km 2. Nueve grados marcan los termómetros a pie de calle. La temperatura perfecta para correr, no se puede pedir más.

Ya quedan atrás las esplendidas vistas de La Concha, y estamos pateando la calle San Martin. Aquí parece haber más gente, y además nos animan. ¡Cómo se agradecen esos ánimos! Si supieran…

No recordaba que la calle San Martin fuera tan larga. Las carreras nos hacen cambiar de perspectiva sobre las distancias, siempre pasa. Entramos en el Paseo de los Fueros. El río Urumea nos acompañará un rato, a nuestra izquierda. Y de frente empezamos a ver el Palacio Kursaal, una esquinita al principio, y de pronto el edificio completo. Antes de darnos cuenta estamos cruzando el puente. En breve pasaremos el km 4. Subiendo la Avenida de Zurriola. Ahí vienen los primeros corredores. Está claro que nos llevan unos cuantos minutos de ventaja. ¡Ánimo!

Gente paseando en la playa, algunos practicando surf. Con este tiempazo creo que a casi todos nos dan un poco de envidia. Después de pasarnos tantos días bajo la lluvia nos conformamos con un simple rayo de sol. Pero, no, a nosotros hoy nos toca correr. Seguimos.

Km 5 y punto de avituallamiento. Muy pocos han parado, yo también he pasado de largo. Será que estamos todos frescos, o que tenemos mucha prisa. Paseo de Salamanca, hace un rato que el gran pelotón del comienzo ha desaparecido, la carrera ya nos han puesto a cada uno en nuestro lugar. Me arrimo a varios corredores que llevan mí mismo ritmo. Elijo a una pareja como "liebre". No me descolgaré de ellos hasta casi llegar a meta. Estoy viendo bastantes mujeres corredoras. Estupendo.

En algunos puntos, a ratos, la gente nos anima. Pero, tampoco demasiado. Domingo mañana, buen tiempo… No es de extrañar. Los donostiarras son unos fenómenos animando, pero hoy están un poco apagados. En otras carreras importantes que se disputan en la ciudad, en la Behobia-Donostia o en la Maratón de Donostia, por ejemplo, los donostiarras año tras año se vuelcan en cuerpo y alma. Sus ánimos te llevan casi en volandas hasta meta. Pero, parece que hoy no es el día, demasiado pronto tal vez.

«¡No os falta nada, unos metros!»

De la calle Soraluze nos dirigimos hacia 31 de Agosto. ¿Cuantas veces habremos estado por aquí de pintxos? Unas cuantas, pero hasta hoy no he sido consciente de que esta calle va cuesta arriba. Vaya, y se nota. La gente nos mira con cara de sorpresa. Comprensible, no todos los domingos por la mañana se celebran carreras por la Parte Vieja de Donostia.

El Boulevard queda a la derecha, y nos dirigimos hacia la calle Hernani. Estamos ya en el Paseo de Miraconcha. Km 8, si no me equivoco. ¡Qué rápido está pasando! La carrera casi está terminada, los dos último kilómetros, y ya está.

Volvemos a hacer el mismo camino que al principio, pocas sorpresas de aquí a meta. Las fuerzas del comienzo empiezan a desfallecer, pero todos apretamos los dientes, sin perder el ritmo. Damos la espalda a La Concha y Ondarreta, y subimos la Avenida de Zumalakarregi. No nos queda ni un kilómetro. Poco antes de llegar a la Plaza Europa, dos corredores que acaban de finalizar la carrera nos animan a gritos: "¡No os falta nada, unos metros! ¡¡¡Áaaanimo!!!". Se agradece y mucho. Los últimos metros, aunque sólo sean 100, a veces resultan los más duros.

Pasamos la rotonda, y ahí está la meta. Llegamos. ¡Ya está, se terminó! 44 minutos 27 segundos. Mejor marca de la que pensaba, y sufriendo bastante menos de lo esperado. Perfecto. Feliz.

Evidentemente, hace un rato que llegaron los primeros. El más veloz completando los 10 km del recorrido ha sido el tolosarra Unai Arroyo, con un tiempo de 31 minutos y 17 segundos. Unos cinco minutos más tarde -31 minutos y 46 segundos- ha entrado la primera mujer, la hernaniarra Maitane Guerrero. Unai y Maitane han tenido el honor de estrenar el pódium del Campeonato de Gipuzkoa de 10 km en ruta. ¡Zorionak!

Finalizada la prueba, nos espera el estupendo avituallamiento preparado por los organizadores. Hay de todo: fresas, mandarinas, manzanas, plátanos, agua, yogures… Así da gusto. Y al fondo los números premiados en el sorteo de regalos. Todo tipo de regalos: pulsometros, comidas en conocidos restaurantes, bicicletas, etc. No he tenido suerte. A ver si el año que viene…