«Queremos seguir trabajando y aprendiendo en colaboración»

El Área de Leioa-Erandio está desierta y en silencio. No hay estudiantes alrededor y se respira una tranquilidad inusual. Pero es que hoy es sábado, una soleada mañana de sábado, en la que no se escucha prácticamente nada en la universidad, como si no hubiese nadie. O eso parece, porque en el Edificio II de la Facultad de Bellas Artes, trabajan a puerta cerrada. Y es que, como si de un ‘barnetegi' se tratase: unas 20 personas se han reunido para trabajar en común sobre un proyecto de animación.

Son estudiantes, ex estudiantes y profesorado de Bellas Artes que se han dado cita en este largo fin de semana de mayo para, continuando con la forma de trabajo colaborativo iniciada con el cortometraje ‘Beti Bezperako Koplak', socializar aquel proceso y crear un nuevo proyecto. Ese primer trabajo, realizado en 2016, ha cosechado un gran éxito a nivel nacional e internacional, ha obtenido varios premios en distintos festivales y, como explica la profesora del Departamento de Arte y Tecnología de la Facultad de Bellas Artes Bego Vicario, "aún prosigue su camino de éxitos".

"Es la continuación de un modo de trabajar. El primer trabajo experimental ha tenido una gran repercusión, a la gente le ha gustado y, por ello, hemos pensado en seguir profundizando en ese modo de crear y ver hasta dónde puede llegar el trabajo colaborativo", plantea Patxi Azpillaga, profesor del Departamento de Comunicación Audiovisual y Publicidad, de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación.

Pero Bego Vicario lo tiene claro: no le gustaría repetir el éxito de ‘Beti Bezperako Koplak'. "No pensamos y no debemos pensar en el éxito. De hecho, nos vendría muy bien no tener éxito. Como en la vida. Si no, te malacostumbras. Imagínate que con el segundo alcanzamos la misma repercusión... pues en el tercero tendríamos aquí a 100 personas. No, no, a eso se le llama morir de éxito", dice riéndose. Porque, a su juicio, el éxito es que "la gente esté aquí, 20 jóvenes, en un largo fin de semana, con una idea en común. No hay mayor éxito".

«Lo de 'Beti Bezperako Koplak' ha sido como una lotería, de repente hemos tenido un gran premio»

Patxi Azpillaga está de acuerdo: "Lo de Beti Bezperako Koplak ha sido como una lotería, de repente hemos tenido un gran premio, pero si lográramos lo mismo corres el riesgo de pensar que siempre es así, y no siempre es así". Para el profesor de Comunicación Audiovisual, el verdadero logro sería crear una plataforma estable "con bases firmes y que ofrezca la oportunidad de continuar trabajando para crear nuevos proyectos desde la universidad, un marco de trabajo común entre estudiantes, exalumnos y profesorado".

Ambos reconocen que con ‘Beti Bezperako Koplak' aprendieron mucho, entre otras cosas que "la gente quiere hacer cosas y que está dispuesta a trabajar", dice Vicario. Entre esas personas sin miedo al trabajo están Kote Camacho y Miriam Inza. El primero repite y la segunda se estrena en este proyecto. "Lo que más me atrajo de esta iniciativa fue el planteamiento de rodar la película en grupo, que se iba a desarrollar en modo barnetegi. Sobre todo, me llamó ver cómo afronta cada persona su labor y la posibilidad que eso te da de aprender", explica Inza, alumna de cuarto curso de Creación y Diseño.

El ex alumno de Bellas Artes Kote Camacho también subraya el trabajo colectivo. Él se dedica a la industria del cine de forma profesional. "Suelo realizar mis proyectos en solitario y este tipo de experiencias son muy positivas para ver cómo funcionan los demás, para relacionarte con otras generaciones, aprender...", indica.

Temas comprometidos

"También es necesario tener interés en la materia con la que vas a trabajar, conectar con ella", explica Miriam Inza. En la película ‘Beti Bezperako Koplak', el argumento era muy duro, ya que estaba basado en unos versos de Maialen Lujanbio sobre la violencia contra la mujer. En esta ocasión, el eje sobre el que pivotará el nuevo proyecto son unos versos de Andoni Egaña y también hablan de un tema comprometido como son los muertos, desaparecidos y las fosas comunes de la guerra civil. "Nosotros le contamos que veníamos de realizar ‘Beti Bezperako Koplak' y Andoni eligió el tema", cuenta Azpillaga.

En ese sentido, en opinión de Bego Vicario, en este proyecto es fundamental reunirse y consensuar todos los aspectos de la obra. "En los versos escritos por Egaña existe una necesidad mayor de acordar y buscar un eje vertebrador común. Veo la estructura de este trabajo como una trenza, algunos elementos irán apareciendo y desapareciendo a lo largo del metraje para volver a aparecer después y enlazar unos con otros trenzando las imágenes", reflexiona Vicario.

Para realizar este proyecto trabajarán con distintas técnicas: mesas de luz, escáneres y técnicas mixtas mezcladas con elementos, en principio, alejados de la producción audiovisual para dotar de entidad a un proyecto que verá la luz en breve.

Fuera de los talleres de nuevo el silencio del campus. Dentro continúa el trabajo bajo la sombra de Juanma Berasategi, que, como recuerda Vicario, fue el precursor y el padre del cine de animación en Euskal Herria y murió el día anterior a iniciarse este proyecto. "Fue un amigo generoso de la mayoría de los que estamos aquí por lo que también está con nosotros de manera virtual".