En Euskadi la mayor parte de la superficie estaría cubierta de arbolado caducifolio debido, sobre todo, a la latitud en la que está y a su orografía montañosa. Sin embargo, por diferentes razones, en especial en Bizkaia y en Gipuzkoa, esta superficie, se encuentra cubierta por monocultivos de especies exóticas (sobre todo Pinus radiata y Eucaliptus globulus). Estos monocultivos debido a su gestión, y por otro lado, al ser especies perennifolias y foráneas, cambian las condiciones ambientales y hacen que en ellas no puedan habitar las mismas especies que estarían en el bosque potencial caducifolio. Por otro lado, al ser perennifolias cambian el ciclo de nutrientes y el del agua, además de los procesos de descomposición.