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Exposición

RETROFISS 2.0 Vintage Computing

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La informática también tiene pasado, hardware y libros

Inaguración: Viernes 1 de junio, 12:00 en la Biblioteca del Campus de Gipuzkoa

Hace ya más de 40 años que los primeros estudiantes llegaron a las aulas de la entonces recién constituida como Facultad de Informática de esta universidad (entonces “Universidad de Bilbao”, hoy UPV/EHU). Desde entonces los estudios han cambiado tanto como nuestras vidas, éstas en no poca medida gracias precisamente a la informática y a las innovaciones tecnológicas concebidas por esas mismas personas que un día fueron estudiantes de esta disciplina.

RetroFISS 2.0, continuación de la exposición RetroFiss1.0 que en la Facultad de Informática donostiarra conmemoró el 40 aniversario del arranque de estos estudios, propone un repaso nostálgico por algunos aspectos de la experiencia estudiantil universitaria y su evolución a lo largo de estos 40 años. En la edición que ahora presentamos en la biblioteca del campus podemos contemplar, por una parte, varios ejemplos de hardware vintage (viejos PCs y Macs, portátiles, servidores, etc.) con los que los alumnos se iban familiarizando con la práctica profesional; y, por otra parte, una selección histórica de la bibliografía (manuales y monografías) que profesores y alumnos han venido utilizando para sus clases y para el estudio a lo largo de estos años. La exposición se completa con una muestra de testimonios gráficos y viejas fotografías de las instalaciones de la facultad. Asimismo, se ofrece una selección de clásicos imprescindibles de la literatura informática, así como una pequeña muestra de bibliografía sobre la historia de esta ciencia, todo lo cual documenta ese cambio constante e imparable de una disciplina joven, pero con densa historia.

En ambas facetas, la práctica y la teórica, es patente el paso de los años, que va dejando obsoletos las máquinas y los libros. Obsoletos y quizás inútiles, o al menos poco útiles, todos los objetos de esta exposición son testimonio tangible de la evolución de la disciplina. Y en cualquier caso son a veces curiosos y siempre evocadores. Una forma de recordar, en fin, que lo que un día fue ultramoderno hoy es antiguo, algo que sin duda les pasará también a las máquinas de última generación y a los libros más punteros de este 2018 en que vivimos.